Querida Ana.....

Se que No tiene que ser fácil tener que transmitir lo que UNO padece cuando la vida se trunca...

Desde que comencé esta pesadilla, no he dejado de luchar y de pelear por intentar tener un hueco en esta sociedad, (la cual creí conocer hasta este momento)...dónde se presume de ser tolerantes y con dotes de solidaridad ante cualquier adversidad....

Cómo muy bien dices, hace dos años me tuve que replantear mi vida profesional, personal por una enfermedad que ni yo misma consigo entender, ya que no solo te etiquetan, sino que además encuentras pocas respuestas a la cantidad de preguntas que acechan y perturban mi día a día. 

De lo único que me ha quedado claro de todo esto y de padecer la SQM es que no dejo de entrar y salir de diferentes consultas en busca de respuestas a tanto sufrimiento. 

Cada vez que me levanto, una noticia o algún hecho hacen que me caiga de nuevo....como si la vida se encargarse de tenerme siempre la zancadilla preparada dispuesta hacer caer al suelo. Yo no tengo un manual de vida de que se disponga tan fácil como me dice y cuentan.

No debería estar escuchando sandeces, falta de respeto hacia mi persona y enfermedad, poner en tela de juicio lo que un día un profesional diagnostico, o estar siendo juzgada continuamente por la sociedad y profesionales... 

Tampoco debería estar siempre con el alma en vilo y sin poder dormir, porque si no son los químicos que me acechan, son las facturas que cada mes debo pagar junto con las necesidades básicas que tengo que cubrir para poder sobrevivir.

Una persona en su sano juicio, no renuncia a la vida por estar peregrinando una solución a diferentes problemas de salud y solicitando en todo momento compresión y ética profesional, las cuales hasta el momento dejan mucho que desear....

Soy muy consciente de lo que me ha tocado vivir y no soy quien para evaluar enfermedades aunque si soy quien la padece, ya que las enfermedades no se elijen para nuestra desgracia..... 

Carmen Lozano.